Fondos de capital privado vs fondos tradicionales 

Las similitudes es que las dos cosas se llaman fondos y quizás en los que coinciden es que agrupan una serie de inversores más pequeños e invierten de la mano de una gestora que trabaja en el mejor de sus intereses.

La gran diferencia es en qué invierten, dónde va a ir mi dinero. Los tradicionales invierten en activos, empresas, deuda que son públicas, cotizadas y que tienen más información, transparencia, regulación… y al mismo tiempo menos oportunidades.

Los fondos de capital privado buscan estas oportunidades en los mercados previos a los públicos, en empresas que no cotizan. Parece que es un mundo pequeño, pero el 80-90% de las compañías que existen son de capital privado. Además, lo que se ha visto es que justo en el momento de antes de salir a cotizar es dónde se producen las mayores revalorizaciones porque es donde hay más oportunidades.

Por el tipo de inversión, por esa oportunidad que se va a buscar en esa compañía que no está en los mercados públicos. Al no cotizar no puedes deshacer la posición con total libertad. ¿Es un inconveniente? No tener esa liquidez es un inconveniente, pero las ventajas pueden ser superiores. En primer lugar, por la prima de iliquidez, que por el hecho de no ser líquido da más rentabilidad, a mayor iliquidez, más rentabilidad, históricamente se cumple.

La segunda gran ventaja es que nos empuja a los inversores a ver nuestra cartera con mayor plazo, y eso es bueno. Uno de los mayores defectos, sobre todo del pequeño inversor, es pensar que necesita siempre ese dinero disponible, aunque luego estás en un depósito un año durante 20 años. Es un error porque estás perdiendo muchísimas oportunidades. Estas inversiones por su naturaleza se diseñan a largo plazo, y eso nos ayuda a reducir riesgo y a tener esa rentabilidad.  

Estos fondos funcionan a través de una serie de fases. En una primera buscan esas oportunidades de inversión. Un fondo tradicional capta el dinero y lo contrata al día siguiente, uno de capital privado no puede hacerlo porque tiene que ir a buscar esas oportunidades. En esta fase de captación y construcción de cartera, no se le pide el dinero de golpe al inversor, se hace de forma mucho más eficiente y se le pide poco a poco conforme aparecen esas oportunidades.

En una segunda fase, es donde se produce el crecimiento de esas compañías privadas junto al crecimiento patrimonial. Por último, la fase de desinversión, cuando alcanzan cierto grado de madurez y han generado todo ese valor es cuando empiezan a desinvertir y a devolver ese dinero a los inversores.

Por lo tanto, fase de captación, inversión y de distribuciones, todo esto con iliquidez, sin poder salirse. Aunque es una iliquidez relativa porque a partir del año 6-7 se empiezan a recibir las distribuciones.

En los fondos de capital priado la gestión es mucho mas importante. Si tu coges un par de fondos de bolsa europea, la diferencia entre un fondo normal a uno bueno puede estar en un 1 o 2%, sin mucha diferencia ni consistencia. En capital privado, la diferencia entre los fondos buenos comparado con los medios es enorme, en lugar de 2% hablamos de 10 o 12% de exceso de rentabilidad respecto a un promedio. Es absolutamente relevante. Un gestor que funciona bien un periodo, suele repetir, de forma natural atraen buenas compañías que les buscan a ellos para financiarles y asesorarles, es un círculo virtuoso que hace que los buenos gestores no solo es que lo hagan mucho mejor, sino que mucho mejor, muchas veces.